julio 31, 2025

Microplásticos contaminan cuerpos de agua en el Estado de México

Toluca, Estado de México miercoles 28 de mayo de 2025.- La presencia de microplásticos en cuerpos de agua del Estado de México se ha convertido en un tema preocupante para investigadores del Instituto Tecnológico de Toluca, quienes advierten sobre sus posibles efectos en la salud humana. Zonas como la presa Valle de Bravo, el humedal de las Ciénegas de Lerma y el río de Chalma han registrado altos niveles de contaminación por estas partículas, cuya degradación es provocada por factores como el polvo, el aire y la tierra.

Javier Illescas Martínez, jefe de la División de Estudios de Posgrado e Investigación del Instituto Tecnológico de Toluca, explicó que los estudios actuales están siendo apoyados por herramientas de Inteligencia Artificial (IA), con el objetivo de identificar el tipo de microplásticos presentes y determinar si podrían estar vinculados a enfermedades como el cáncer o la salmonela.

“Los microplásticos son fragmentos de plástico que han sido degradados hasta alcanzar tamaños menores a cinco milímetros. Hemos encontrado estas partículas en cuerpos de agua como la presa de Valle de Bravo y el río de Chalma, donde además hemos detectado que las personas podrían tener ya en su organismo el equivalente a una cucharada de este compuesto”, señaló el investigador.

Uno de los mayores desafíos, agregó Illescas Martínez, es que los plásticos, al fragmentarse, se mezclan con otros contaminantes, haciéndolos aún más peligrosos para el consumo humano. “Cuando arrojamos una botella al agua, no desaparece. Se rompe en pequeños fragmentos debido a la abrasión del ambiente, y eso complica identificar su tipo y origen”.

Frente a este panorama, el equipo de investigación ha comenzado a construir una base de datos que les permitirá clasificar los microplásticos por región. Para ello, colaboran estrechamente con expertos en IA que les ayudan a interpretar los datos recolectados mediante técnicas avanzadas de caracterización de materiales.

Illescas Martínez advirtió que esta problemática va en aumento. En muestras de medio litro de agua tomadas en las zonas analizadas, han llegado a encontrar hasta 900 partículas plásticas. Sin embargo, se presume que hay muchas más, imposibles de detectar debido a su minúsculo tamaño.

Casos críticos: Valle de Bravo y el río de Chalma

La presa de Valle de Bravo, uno de los cuerpos de agua más conocidos del estado, es visitada por turistas que nadan o practican deportes acuáticos. Sin embargo, muchos no saben que los trajes de baño que utilizan desprenden fibras sintéticas que contaminan el agua. Lo más alarmante es que esta misma agua, tras un tratamiento para remover materia orgánica, es enviada a la Ciudad de México como “agua potable”.

El caso del río de Chalma también resulta alarmante. Este destino turístico y religioso ha sido fuertemente contaminado por microplásticos y residuos orgánicos como heces fecales, metales, velas y restos de alimentos. “Ya no es posible considerar que esa agua sea bebible”, advirtió el especialista. “El costo de purificación es alto y no se garantiza la eliminación total de los contaminantes”.

El investigador hizo un llamado urgente a la sociedad para que tome conciencia sobre el uso y la contaminación del agua. “Debemos dejar de pensar que el agua es un recurso infinito. Si no llueve, no hay agua. Y el 97% del agua del planeta está en los océanos. Además, ya hemos perdido los glaciares, como los que había en el Nevado de Toluca”.